Jason Colon es un joven que vive en Florida, Estados Unidos. Y como otros tantos, usa sus (literalmente) flamantes AirPods mientras se ejercita en el gimnasio. Sin embargo, tuvo una peligrosa y pésima experiencia con los audífonos de Apple recientemente que, por suerte, no terminó en tragedia.
Los AirPods explosivos
Cuando Jason se encontraba haciendo ejercicio en el gimnasio, notó que sus audífonos estaban funcionando mal. También se dio cuenta que de uno de ellos comenzó a salir humo blanco. Naturalmente, los retiró de sus oídos para después dejarlos sobre una mesa y salir a conseguir ayuda; pues el humo no paraba de emanar, aunque en ese momento aún no había explosiones.
Algunos minutos después volvió y se asombró al ver que el mismo audífono que estaba desprendiendo humo blanco, ahora estaba calcinado casi en su totalidad. Derretido, quemado y con señales evidentes de haber estallado.
En el momento en que sucedió todo, según Colon; no había nadie más en el gimnasio. Es decir: los audífonos estaban solos cuando estallaron y no hubo ningún testigo visual del incidente.
Como ves en la imagen anterior, no cabe duda que el aparato estalló. Por suerte no pasó a mayores. Aún no se sabe exactamente qué fue lo que sucedió, pero según un vocero de Apple; la compañía ya se encuentra investigando. Hasta el momento este es el primer caso de este tipo reportado, al menos con AirPods.