Hace un tiempo salieron reportes que clamaban que Apple había recortado violentamente la producción del iPhone X, específicamente en un 50%, dejando a Samsung con “los crespos hechos”.
Eso que salió a finales de enero había quedado en nada, hasta hoy, donde Nikkei asegura que esta información es cierta y que el mayor afectado no es Apple, sino que Samsung.
Esto porque la surcoreana es la encargada de la fabricación de los paneles OLED que usa el terminal y sus proyecciones eran mucho mayores.
Entonces Samsung, que incrementó la producción de pantallas OLED con una inversión de 12.6 mil millones de dólares para este año, pensando en el éxito del equipo de Apple, estarían en problemas.
Las mismas fuentes aseguran que Samsung ya está probando el mercado chino para abastecer de estos paneles y claro, probablemente a menor precio que el ofrecido a Apple, por lo que existe la posibilidad de que en algunos meses veamos equipos chinos con paneles OLED de alta calidad.
Cuando lo anterior pase, ya lo sabes, quizás esa pantalla correspondía a un iPhone X que no se hizo, porque el interés, al parecer, no fue el suficiente.